Para el antropólogo la consideración respecto de un lugar donde realizar sus investigaciones no siempre corresponde a una decisión violenta, sino que ésta es el producto de varios factores: interés de estudio, áreas geográficas determinadas, orientación académica previa, preocupación por ciertos rasgos culturales determinados por nombrar algunos de ellos. En mi elección para el lugar de estudio se juntaron varios elementos: el hecho de mi interés por la Antropología Urbana, mi experiencia de investigaciones pasadas en dos asentamientos distintos dentro del mismo país que me llevaron a considerar el tercero para tener una idea global del país, y también mi orientación política que hacía más atrayente el hecho de estudiar una sociedad dinámica contemporánea dentro del contexto de un país del tercer mundo que precisamente es mi país.
Manta, la ciudad de mi estudio es un puerto pesquero fundamentalmente en el cual, debido al desarrollo de esta industria e industrias relacionadas, así como debido a la importancia del puerto marítimo, hacían de ella un lugar interesante dentro de la perspectiva del estudio de una sociedad en la cual la dinamia se la encuentra en varias facetas. Con estas características, mis anhelos de estudio y el contexto interdisciplinario dentro del cual iba a desenvolver mi investigación se hacían más lógicos y más excitantes.