La gestión de la capacitación ha sido definida como el proceso a través del cual se organiza y realiza la acción educativa dirigida a mejorar capacidades de las y los servidores y autoridades públicas. Dicho proceso cuenta con varias etapas que van desde la identificación de necesidades o problemas de gestión pública, hasta la evaluación de los procesos educativos o de fortalecimiento, según los objetivos estratégicos y metas de cada institución. En el presente documento se sistematizan cinco Buenas Prácticas que pueden utilizarse como insumos para iniciativas similares en otros contextos institucionales. Para la identificación de las Buenas Prácticas se tomaron en cuenta los enfoques de calidad y eficiencia de las intervenciones, que abarcan no sólo la gestión y los procedimientos, sino fundamentalmente la respuesta a necesidades concretas derivadas de la estrategia institucional.