En la década de 1930, en Ecuador, la democracia liberal y el sistema representativo fueron cuestionados, se desató una amplia movilización popular y surgieron los partidos de masas. David Gómez analiza este lapso histórico para dar cuenta del tipo de Estado que se configuró, los partidos políticos y su articulación con las organizaciones sociales populares, las elecciones dentro del sistema político-electoral, entre otros temas. Su reflexión se desarrolla a partir de una idea derivada de la teoría normativa de la democracia: en varios países de América Latina, en general, y en Ecuador, en particular, la falta de institucionalización y la excesiva inestabilidad política son consideradas una falla en las democracias. Gómez discute los orígenes y significados de este planteamiento a fin de abrir caminos para repensar la democracia, la movilización popular, los partidos políticos y el modelo de configuración del Estado en la primera mitad del siglo XX.